Son las 08H00 del viernes anterior, y 25 policías se encuentran concentrados en el polígono de tiros, ubicado en la loma del colegio 12 de Marzo de Portoviejo. Jorge Coello, principal del GOE, indica a los policiales el manejo de las armas y haciendo una demostración de cómo se hace, se arrodilla para cargar de balas la alimentadora, el resto de gendarmes observan con atención el procedimiento. Coello se pone de pie y usando unos tapones de oídos y unas gafas de protección, levanta su mirada, rastrilla su arma y apunta a la silueta que se encuentra a unos 7 metros de distancia. “Fuego”, es la palabra que da la orden para disparar y un estruendo se escucha después de esa frase, el silencio vuelve por unos segundos y otro disparo se vuelve a escuchar. La demostración estaba hecha, ahora es el turno para el resto de los uniformados, a cada uno se les dio diez municiones. Enpieza el entrenamiento Jimmy Navarrete, uno de ellos, se concentra para poder realizar el ejercicio de tiro de la mejor manera, ya que el mismo tiene una calificación de 20 puntos, de los cuales el minino puntaje es 14. Mientras Navarrete disparaba conjuntamente con sus 25 compañeros, Coello comenta que esta práctica tiene dos objetivos, el primero es el de re entrenar a los uniformados en el buen uso del nuevo armamento dado por el gobierno, como son las armas marca Glock, modelo 17, con municiones de calibre 9 mm. El segundo objetivo mencionado por Coello, es que a partir de aquella evaluación, los uniformados que no completen o no alcancen un puntaje igual o mayor de 14, no estarán aptos para portar armas e inmediatamente procederán a retirárselas. Pero… ¿podrán los uniformados brindar seguridad si se les retiran las armas?, fue la pregunta de un periodista de El Diario, a lo que el Principal del GOE respondió que si en un caso, los policías no llegasen a completar el puntaje, la institución les dará una segunda oportunidad para que se capaciten. Si en esa segunda oportunidad, no vuelven a alcanzar la puntuación requerida definitivamente la persona no puede utilizar arma, porque también hay que salvaguardar la vida de ellos y de los ciudadanos, ya que puede ocurrir alguna desgracia por el mal uso de las mismas, culminó Coello. La calificación La conversación se detuvo por unos minutos, debido a que el primer ejercicio había terminado. Ahora es el momento de la calificación. Coello empezó a contar pero el periodista no lograba entender como calificaban, entonces el principal del GOE explicó que los disparos que estén dentro de la botella (comprende la cabeza, el tórax hasta el ombligo), eran calificados sobre cinco. Cuatro puntos correspondían a los disparos que se encontraban en la parte baja del ombligo, tres y dos puntos era el valor de las balas que hayan pegado en los brazos y piernas respectivamente. 25 Policías Son entrenados los miércoles y domingos en el buen uso del armamento dado por el gobierno. 50 uniformados Por semana son entrenados en el polígono de tiros de la Policía Nacional.