Nervioso y todavía asustado es como se encuentra Fernando Bravo, después de que a su vehículo se le saliera la llanta delantera que por poco le quita la vida.
Bravo indicó que el percance sucedió la tarde del domingo.
"Fuimos de paseo con mi familia a Quito, la verdad me olvidé de revisar la llanta izquierda-delantera y cuando estabamos de regreso el neumático se salió y por poco nos volcamos", explicó Bravo.
Él recomienda a los conductores que cuando vayan a realizar algún viaje nunca se confíen del estado del carro, pues deben de revisarlo antes de que se pueda lamentar.
Afortunadamente Bravo fue ayudado en una gasolinera y pudo llegar a su casa con su familia. <