Agapo Vera, quien transitaba por el sector en el momento del percance, aseguró que los hechos se dieron alrededor de las 07h00. Los motociclistas bajaban por la calle Washington a mediana velocidad, cuando al llegar a la intersección de la Colón, un volquete salió sin respetar el disco pare, originando que los motociclistas se estrellen contra la carrocería metálica del pesado automotor.

Los cuerpos de los jóvenes quedaron botados sobre el asfalto mientras que el conductor del volquete siguió con rumbo incierto.

La ambulancia con paramédicos del Cuerpo de Bomberos arribó al sitio para socorrer a las víctimas y corroboraron el fallecimiento de uno de ellos, mientras que al sobreviviente lo trasladaron a la sala de emergencia del hospital Napoleón Dávila Córdova.

A las 07h30 a la morgue del cementerio general acudió Carmen Jaramillo para aclarar las dudas que tenía relacionado a la muerte de uno de sus vástagos. Un niño de once años la acompañó.

El dolor para la mujer se puso en manifiesto al ver que sobre el mezón se encontraba el cuerpo de Wellington Odilio. Carmen no podía creer lo que veían su ojos; así que tomó al occiso de su mano izquierda y lo invitó a que la siga.

Sin embargo, ya para esa hora, los restos del joven perdían el calor. Los curiosos tampoco sorportaron la desgarradora escena, así que soltaron el llanto.