Luego de la clausura de radio Cosmopolita de Quito, Fabián Jaramillo, titular de Supertel, anunció el cierre de otras 20 emisoras durante una entrevista con Ecuadoradio.

Los motivos para el cierre de las radios van desde el no pago de multas hasta la decisión de no renovar la concesión de las frecuencias, explicó el funcionario.

Durante la entrevista, el funcionario hizo un llamado a las emisoras que están en esas condiciones, a quienes les sugirió que apaguen sus equipos y se “silencien”, si no quieren que se les aplique la ley y se ejecute la requisa de equipos, según informó diario El Comercio. 

Según Jaramillo, la actuación de Superintendencia en el cierre de radios es estrictamente técnica. Sin embargo, Fernando Guanoluisa, dueño de Cosmopolita, asegura que el cierre de la radio se dio por tintes políticos.

“Nos clausuraron por haber entrevistado a Lucio Gutiérrez”, señaló el radiodifusor. Guanoluisa comentó que un funcionario de la Superintendencia “nos dijo que había sido una tontería que en las actuales circunstancias hubiéramos realizado la entrevista”.

Por su parte, Supertel asegura que la emisora no estaba al día con el pago los derechos del uso de la frecuencia, por lo cual se procedió a su clausura y retiro de sus equipos.

El asambleísta independiente y radiodifusor, Jimmy Pinoargote, indicó que un artículo de la Ley de Radio y Televisión establece que el Tribunal de lo Contencioso y Administrativo es una de las instancias de apelación en estos casos, por lo cual no se debió proceder a la clausura hasta que el tribunal no se pronunciara sobre el hecho. 

“Debe haber unas 200 emisoras trabajando ilegalmente porque el Consejo Nacional de Telecomunicaciones no les renueva las frecuencias. Es una forma de presionar a los dueños, para que hagan méritos si quieren evitar la reversión de frecuencias”, sostiene Pinoargote.

Pese a las declaraciones de Pinoargote, el superintendente Jaramillo aclaró que mientras cualquier caso se resuelve en el Tribunal, legalmente la radio sancionada no puede transmitir.