Lamentablemente ésta tradición ha acelerado su muerte en las últimas décadas, debido al avance de la tecnología y a los nuevos entretenimientos. Dice Ángela Zevallos, del grupo cultural Debarro, que existe una gran diferencia entre la realidad de antes con la actual debido a que en los sectores rurales han llegado muchas innovaciones. Explica: “Antes los abuelos y ancianos eran la televisión de la casa, ellos representaban la sabiduría y cuando contaban anécdotas o sus relatos la gente los escuchaba, incluidos los más jóvenes, pero ahora se le hace más caso a la televisión por lo que los ancianos ya han sido relegados”. Otro problema: la muerte de cuenteros A criterio de Alberto Miranda, presidente de la organización Fortaleza de la Identidad Manabita, existe un problema mayor: los representantes de la tradición oral están muriendo. “Por muchos años los cuentos, leyendas y amorfinos eran lo más entretenido de la vida cotidiana de nuestros pueblos y hoy está a punto de desaparecer, tal es así, que los únicos que fueron protagonistas (ahora llamados cuenteros) de estas noches de ingenios y alegrías, los más jóvenes están en un promedio de los setenta años, la gran mayoría ya no vive, como también dejará de vivir esta tradición que desaparecerá el día en que desaparezca el último cuentero”, dice Miranda. De los elementos de la memoria oral el más amenazado con desaparecer es “La Décima”, que por su extensión es más difícil recordarla y por lo complejo de su estructura es difícil componerla. Se estima que dejó de crearse hace unos cincuenta años, es decir, que lo que aún se recita tiene este mínimo de edad; se calcula que el noventa por ciento de éstas se perdió para siempre. Aún queda un porcentaje que urge rescatarlo. Entre las alternativas que han encontrado las agrupaciones culturales para rescatar la tradición oral están los festivales de cuenteros, uno de ellos en la comuna de Río Caña de Santa Ana, a cargo del grupo La Quijada. raymundo zambrano y UN AÑO PARA CELEBRAR Este año Raymundo Zambrano celebra un cuarto de siglo de vida artística. Él se ha dedicado a luchar por la tradición oral. Rescatar la memoria de los pueblos ha sido un objetivo que ha requerido de gran esfuerzo. Ha organizado festivales de cuenteros para que la chispa de la cultura comience a regarse en todas partes. Don Pascual, el personaje de Raymundo Zambrano, tiene raíces manabitas. Los cuentos de don Pascual van saliendo de acuerdo a su estado de ánimo, del espacio o de la gente con la que cuenta. Además, puede improvisar una copla a una dama, recordar cómo eran las fiestas en su tierra, cantar una canción. En sus intervenciones emplea la ironía. Versos del tipo: “La mujer que a los quince años arma tremendo relajo es porque algo extraño le está picando allá abajo”. Está satisfecho por cumplir 25 años en la actuación, aunque reconoce que le falta mucho por hacer. Se define como un hombre a quien no le gustan los homenajes, pero acepta con gusto los que se les va a hacer este año, porque cree que la ocasión así lo amerita. El actor asegura que ha madurado, así como su personaje cumbre: Don Pascual. Y es que él se ha convertido en todo un referente para la actuación en Manabí. Nació en Santa Ana. Raymundo Zambrano ACTOR y cuentero u“Siento una satisfacción muy grande, el poder llevar los amorfinos a cualquier parte del mundo ha sido algo espectacular”. Alberto Miranda FORTALEZA DE IDENTIDAD MANABITA “Manabí es una potencia cultural, una provincia que ha mantenido conservada una buena parte de la cultura montubia”. Ángela Zevallos GRUPO CULTURAL DEBARRO “El amor por la tradición oral debe enseñárseles a los niños desde pequeños. Es importante conservar nuestra identidad”. EN SANTA ANA Uno de los festivales de cuenteros más destacados en Manabí es el que se realiza cada año en la comuna de Río Caña en Santa Ana. COLORIDO Los encuentros para rescatar la tradición oral se caracterizan por su despliegue de colorido y recitación de décimas, versos, cantos, canciones, creencias y adivinanzas. LA MÚSICA La magia de la tradición oral vence idiomas y hasta continentes. En los festivales que se realizan en Manabí ocupa un lugar importante la música de grupos populares. EN EL CAMPO El grupo cultural Debarro ha realizado estudios e investigaciones para mantener viva la tradición oral. El trabajo de campo es una labor que requiere de tiempo.